miércoles, 25 de mayo de 2011

fauna mexicana

Flora y fauna mexicanas


La riqueza de especies de México es resultado de la multiplicación de organismos provenientes del norte (especies neárticas) y del sur (especies neotropicales) que colonizaron el territorio mexicano. Su basto conjunto permite que México ocupe el cuarto lugar mundial entre los países megadiversos. Los estados más ricos en especies de flora y fauna son Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Veracruz y Chiapas. Esta última entidad alberga la mayor diversidad florística con 8.248 especies registradas, y cuenta con 35% de los vertebrados del país.




La fauna mexicana incluye 491 especies de mamíferos, 144 de ellas son endémicas (es decir, son propias y habitan en un área limitada); además existen más de 1.000 especies de aves, 704 de reptiles (53% de las cuales son endémicos), 285 especies de anfibios y más de 2.000 especies de peces. Asimismo, se estima que en el país existen alrededor de 35.000 especies de plantas, las cuales significan 9% del total de especies vegetales del planeta. Del total de plantas que existen en México, 40% son endémicas. Las regiones naturales más ricas en especies florísticas son los bosques de las zonas templadas.
El bosque de quercus contiene 7.000 especies, el meófilo de montaña 3.000, el de coníferas y encinos 7 000, los tropicales caducifolio y subcaducifolio 6 000, el bosque tropical perennifolio 5.000, el matorral xerófito 6.000 y la vegetación acuática y subacuática 1.000.


Muchos especialistas en biodiversidad han demostrado que las actividades humanas ejercen gran influencia en la alteración y pérdida de hábitats, lo cual genera disminución en el número de especies y el tamaño de poblaciones. Entre las actividades que mayores daños provocan a la biodiversidad destacan: la deforestación, la pesca excesiva, la introducción de especies ajenas al ecosistema, el abundante empleo de fertilizantes, el uso de fumigantes y las grandes obras de ingeniería, como las presas.
Con la finalidad de cuidar la diversidad biológica de la República Mexicana, diversas áreas naturales adquirieron el estatus de protegidas, por lo cual su conservación, uso y protección están regulados por la Ley general del equilibrio ecológico y la protección al ambiente, misma que fue publicada en 1994. Estas áreas naturales son las reservas de la biosfera, los parques nacionales, los monumentos naturales y las áreas de protección de flora y fauna.